"Porque, para mí, en este mundo, no hay nada más aterrador que el ser humano"
"Reseña del primer tomo: Un tema tan internalizado y cotidiano como el peso de la mirada ajena sobre nosotros, abordado y representado por uno de los maestros del terror en el manga, Junji Ito.
TW: Abuso sexual/violaciones, Violencia, Suicidio. No hay censura alguna en las representaciones gráficas y hay personajes que son menores de edad.
Llevaba apenas 30 páginas de este primer tomo cuando la obra me hizo llorar mientras sentía un fuerte dolor en el pecho. Sinceramente, no esperaba encontrarme con un relato tan crudo, pues más que asustarme ha logrado entristecerme, enfurecerme e inquietarme, además de enfrentarme con aspectos de mí misma con los que lucho a diario. Sin embargo, no puedo negar que esta es una historia excelente narrada de forma impecable, pero no es recomendable para personas sensibles o aquellas que hayan experimentado situaciones traumáticas o atraviesen depresión.
La historia nos presenta a Yozo Ooba, protagonista al cual acompañaremos desde su infancia. Yozo le teme a la vergüenza y la humillación que supondría no ser capaz de cumplir con lo que otros esperan de él, por lo cual no le importa ponerse en ridículo a sí mismo para alcanzar este fin. El joven carga inevitablemente con la ansiedad generalizada y social (que va sólo en aumento) de forzarse a ser aquel personaje que creó para sentirse aceptado, ese mismo que lo ahoga y consume a lo largo de la historia al igual que su terrible pasado, porque la realidad es que Yozo siente que no es nada ni nadie. Un ser carente de valor, expuesto y susceptible a ser objeto de las demandas y deseos de otros. Además de esto, la historia nos presenta la hipocresía de la sociedad a través de diversos aspectos, como por ejemplo, la necesidad de las familias de clase alta de mantener las apariencias sin importar a qué costo, o la manera en que todas las personas se engañan unas a otras, ayudándose entre sí siempre con segundas intenciones. Estos, junto con el resto de sus comportamientos, son aquellos que Yozo no logra comprender del ser humano desde que tiene uso de razón.
"¿Qué pasa? Por favor, no te rías cuando digo que no confío en el ser humano. ¿Acaso los hombres no viven desconfiando unos de otros como si fuese lo más normal del mundo?"
A través de todo el primer tomo no pude quitarme de encima la aterradora y sofocante sensación del protagonista al no sentirse capaz ni merecedor de decir "No", buscando siempre conformar a un otro ya que no se tomaba a sí mismo en consideración. Después de todo, Yozo siente que él no es nada ni nadie. El joven es acompañado por un constante sentimiento de que no pertenece a ningún lado, un sentimiento que se aloja en su tumultuoso y oscuro interior a la vez que se encuentra atosigado por los fantasmas de su pasado. Todo esto lo lleva a creer que no es merecedor de otra cosa excepto de aquel abuso perpetuado en el tiempo, de diferentes maneras y por distintas personas cuyas miradas juzgadoras lo rodean e intimidan. De esta manera, lo vemos encontrar en sus bromas o "payasadas" como él las llama, un incómodo "refugio" del cual realmente no es capaz de escapar.
Comentarios
Publicar un comentario